miércoles, 31 de diciembre de 2014

Fin de año deportivo: Gorbea y San Silvestre Rekalde

Después de un buen entreno de fondo el pasado domingo (23 km a ritmo cómodo), ayer martes subí al Gorbea desde Sarria. Un día espectacular, pero con mucho frío. Salimos del Parketxe con -5ºC y en la Cruz habría unos -7ºC con un fuerte viento, por lo que apenas se podía estar unos minutos.
Un bonito paseo en un día mucho más tranquilo para subir al Gorbea que el día 31 de diciembre o el 1 de enero, en los que sube tanta gente que no se disfruta.

Por otra parte, esta tarde he vuelto a correr la San Silvestre de Rekalde, ahora San Silvestre de Bilbao-Rekalde. He sufrido bastante, ya que he salido demasiado rápido y en el km 3 me ha empezado a doler el flato y he aguantado como he podido hasta la meta. Además, ahora el recorrido es ascendente y eso la hace más exigente que antes. De todas formas he acabado a un ritmo de 4:42 y he terminado en el puesto 426 de 2186.


viernes, 26 de diciembre de 2014

CaCo por el Gorbea

Hace unos día pudimos ver en Bilbao buenas películas de montaña en el Bilbao Mendi Film Festival, un festival de cine de montaña. De las pocas pelis y documentales que pude ver, algunas de las que más me llamaron la atención trataban sobre carreras de montaña o simplemente correr por la montaña. Es lo que ahora se conoce como trail running, pero a mí me gusta llamarlo CaCo, como me enseñó el exciclista y gran deportista donostiarra Peio Ruiz Cabestany, por las iniciales de Caminar-Correr, que es en realidad lo que yo hago cuando corro por el monte, porque en las cuestas empinadas para correr hay que ser un superatleta, lo mismo que para bajar corriendo por lugares complicados.
Uno de mis héroes actuales en esto del trail running es, sin duda, el increíble Kilian Jornet, que acaba de batir el récord de subida y bajada al Aconcagua, dentro de su proyecto Summits of My Life con el que quiere batir los récords de subida y bajada a varias de las montañas más altas del planeta. Por ahora ya lo ha conseguido en el Montblanc, el Cervino, el McKinley y el Aconcagua. Le faltan el Elbrús y el Everest. Lo dicho, un fenómeno.
Así que, tras ver su película "Déjame vivir" sobre el récord en el Cervino, me entraron unas ganas locas de correr por el monte. El domingo 14 estuve dos horitas corriendo entre Bilbao y Pagasarri pisando barro, y esta semana, tras la Media de Vitoria, me fui el martes al Gorbea y di una buena vuelta de CaCo por Itxina, uno de los lugares más mágicos y salvajes del Parque del Gorbea.
Viendo a Kilian Jornet corriendo cuesta abajo por el Cervino parece que es algo sencillo, pero yo soy muy miedoso y en sitios con muchas piedras y con posibilidad de pegarme un buen porrazo o de hacerme un esguince prefiero bajar corriendo despacito o andando. Además, correr cuesta abajo es casi más duro que subir corriendo, puesto que como no estés en forma acabas con unas agujetas en los muslos que te duran una semana.
La vuelta por Itxina, entrando por Ojo de Atxular y visitando la cueva de Supelegor, es una pasada, sobre todo con buen tiempo, como tuve yo el martes, con el suelo seco y con solecito. No recomiendo a nadie meterse a Itxina con niebla, ya que incluso con buen tiempo, y conociendo el camino, me despisté dos veces del sendero. Hace años las marcas de pintura ayudaban a no perderte, pero ahora solo hay hitos con piedras superpuestas y es muy fácil despistarse, porque Itxina es todo igual.
Os dejo una fotos y el track del Garmin.
Subiendo hacia Itxina
En el Ojo de Atxular
Poste indicador. Luego es más difícil seguir el camino.
Complicado correr por aquí. Hay que mirar dónde pisas y además no perderte.
Cueva de Supelegor.
Al solecito.
Más cuevas en Itxina.
En algún tramo sí que se puede correr. (Autofoto con minitrípode).
Fondos de antiguas txabolas de pastores.
Habitantes de Itxina.
El Gorbea desde Itxina.
Hitos como éste evitan que nos perdamos, pero si hay niebla no los ves.
Restos de las antiguas señales de pintura.
Por fin en Arraba. Desde aquí ya se puede correr cómodo hasta Pagomakurre.
No fui el único que corría por el monte.

martes, 23 de diciembre de 2014

Media Maratón de Vitoria-Gasteiz

El domingo participé con unos amigos en la Media Maratón de Vitoria. Hacía muchos años que no la corría, tantos que incluso tengo dudas de si la corrí alguna vez. Creo que sí, cuando preparaba el Maratón de Barcelona en 1996. Como veis, ha pasado mucho tiempo y entonces no teníamos ni strava, ni garmin, ni nada, y yo no apuntaba los kilómetros que hacía, así que es normal que tenga dudas de si la corrí o no.
Bueno, el caso es que este año 2014 sí la he corrido y he disfrutado.
Esta semana pasada me tocaba semana de recuperación activa, o sea, correr menos días y menos kilómetros, y no sé si ha sido por eso, pero el caso es que durante toda la semana me encontré bastante flojo, muy cansado, durmiendo mal y con pulsaciones por la mañana más altas que otros días. En fin, una de esas semanas en las que te cuesta salir a entrenar y en las que piensas que la carrera del domingo no la vas a correr, porque, total, para ir mal.
Pero el domingo ya al levantarme me sentía con mejor cuerpo (tal vez fuera la semana de recuperación), y según íbamos para Siberia-Gasteiz cada vez tenía más ganas de correr.
Llegamos a Vitoria con mejor temperatura que la anunciada (10ºC y sol) y entre una cosa y otra el caso es que llegamos a la salida literalmente corriendo porque se nos hizo tarde.
Bueno, empecé la carrera y poco a poco fui cogiendo pulsaciones hasta llegar a las que sé que puedo mantener mucho rato, un poco por encima de mi umbral que es de 139 ppm (podéis ver el gráfico en el archivo del Garmin).
Hacia el km 6 me junté a un par de corredores que iban muy parecido a mí y fui con ellos casi hasta el final. Íbamos a buen ritmo, marcando casi todos los kilómetros parciales cercanos a los 5', lo que me animaba, pues eso significaba acercarme a 1:45, que era mi objetivo.
En el km 19 empecé a apretar un poco y finalmente entré en meta con 1:44:35, que es mi mejor marca en un medio maratón oficial (en la Be-SS hice 1:34 en 1997, pero son 20 km).
Mis sensaciones fueron bastante buenas toda la carrera, cumpliéndose una vez más algo que tengo comprobado: cuando peor me siento en la semana previa a una carrera, mejor la corro.
Mirando páginas web en las que puedes calcular tu tiempo en maratón según otras distancias (como en calculadora McMillan), veo que con esta marca en medio maratón podría correr el maratón en 3:40. Casualmente mi mejor marca en maratón es 3:39 en San Sebastián en 1997, y este año 2014 corrí Rotterdam en 3:45, o sea que mi objetivo para Sevilla'15 de bajar de 3:39 está en mis piernas si no se tuerce nada de aquí al 22 de febrero.
Pues, hala, a seguir entrenando.

viernes, 12 de diciembre de 2014

Cambio de neumáticos (o sea, zapatillas nuevas)

Cada cierto tiempo a todos los corredores nos llega la hora de preguntarnos si debemos o no cambiar de zapatillas. Hay quien dice que la vida útil de las zapatillas son de unos 600 km. Otros dicen que 1000 km y hay quien dice que depende el uso que les hayamos dado, nuestro peso, etc.
Yo suelo cambiarlas cada 1000 km, más o menos. Así que, como mis Saucony Triumph 11 que me compré el año pasado en la feria del corredor del maratón de Nueva York ya han completado unos 1.100 km pues las he cambiado hoy mismo por las Saucony Triumph ISO, que son las que las han sustituido en el catálogo de Saucony. Antes tuve las Triumph 10 y sigo con la marca americana ya que estoy muy a gusto con ellas.
Os pongo un par de fotos de las nuevas zapatillas junto a las viejas. En una se ve claramente la diferencia de flexibilidad de una suela con 1.100 km y de otra sin estrenar. Aplicando la misma fuerza ya veis cómo se doblan una y cómo no se dobla la otra.
A por otros 1.000 km.
 Las nuevas saucony Triumph ISO (izquierda) y las Triumph 11 (derecha).
Aplicando la misma fuerza la suela de las Triumph 11 con 1.100 km se dobla mucho más que la suela sin estrenar de las Triumph ISO. Prueba de que ya era hora el cambio de zapatillas.

sábado, 6 de diciembre de 2014

Entrenamiento para soltar el cerebro (y las piernas)

Ayer como tenía un día de fiesta, aproveché para correr por nuevos caminos. Es una de las cosas que más me gusta hacer cuando tengo oportunidad. Cuando tengo un día entero libre, cojo el coche, conduzco una hora o algo más, y hago una vuelta en bici o corriendo por lugares nuevos o por los que no suelo andar mucho. Es algo fenomenal para despejar la cabeza, ya que mis sentidos se llenan de sensaciones nuevas: nuevos paisajes, nuevos olores, nuevos sonidos,... Y eso no tiene precio. Da lo mismo lo que me gaste en gasolina, en autopista, en la comida o en lo que sea. Sí, ya sé que si corres desde casa por los sitios de siempre te sale gratis, pero no es lo mismo. Yo creo que el dinero que te gastas en un día así es el dinero mejor invertido. Ganas muchísimo más que lo que pagas, y eso, repito, no tiene precio.
Ayer me fui a Bayona y corrí 16 km por la orilla del río Nive, por un camino vecinal que es un paseo muy transitado por la gente que vive allí y que conocí en mayo en la segunda etapa de la ruta cicloturista Burdeos Bilbao, ya que nos hicieron pasar por allí.
Dejé el coche junto a la sede del Aviron Bayonnais, donde se hacía antes la llegada de la Luchón-Bayona, y me puse a correr a ritmo tranquilo, para soltar piernas a la vez que despejaba la cabeza. La pena fue el chubasco que me dejó empapado en diez minutos a mitad de la ruta, pero bueno, corriendo tampoco pasa nada por mojarte un rato. Os dejo el track de la ruta, por si alguien quiere ir allí, y unas fotos que saqué.

lunes, 1 de diciembre de 2014

Desde Santurce a Bilbao 2014

Ayer corrí la "Santurce Bilbao", una bonita carrera en la que no particiba desde hacía años, ya que desde que he vuelto a correr con más asiduidad he participado en el Maratón de San Sebastián, que suele coincidir en el calendario con esta carrera.

Aunque se anunciaba mal tiempo, al final no fue para tanto. La temperatura fue incluso algo elevada (unos 16ºC) y solo llovió al final. Fui con un grupo de amigos corredores de la S.C. Bilbaina y más o menos todos estuvimos en nuestro nivel. Mi idea era salir despacio hasta la mitad y luego apretar más, pero, como suele pasar, al de poco de salir ya estaba corriendo más rápido que lo que había previsto, pero como me encontré bien no me frené demasiado y pude regular bien. Tras la primera parte, en la que se sube un poco, fui controlando mi pulso todo el rato y aguanté el ritmo casi toda la carrera, menos al final, donde metí mi "miniturbo" y aceleré un poco, como se puede ver en la gráfica de pulsaciones de mi Garmin.
Al final hice el tiempo que más o menos había pensado (1:18:09), a un ritmo medio de 5:01, lo cual para mí está muy bien y me indica que voy en buen camino para el Maratón de Sevilla de febrero.
En resumen, una bonita carrera, con buena participación (unos 4000 atletas) y un buen ambiente.
Y felicidades a mi amigo Gontzal Bilbao que hizo un más que meritorio 18º puesto. Un crack.